7.9.08

Estado: ausente.

Algunos empujan, otros saludan, algunos ni siquiera notan mi presencia. En el barrio que a las tres de la tarde duermen su siesta de lunes, en el barrio donde la unica salida es la entrada; me miran como si me conociesen, pero aun no lo saben con total seguridad y yo no tengo a donde ir...

que los vientos de la primavera me lleven hasta
donde
mueren
los infinitos.